¡Hola viajer@s!
Este es el primer post de la serie acerca de nuestra ruta por la Costa este de Canadá. Os escribo en el tren desde Montreal camino a Ottawa después de pasar dos días en la ciudad de Montreal y me gustaría contaros cómo ha sido nuestra experiencia visitando la ciudad. En general, creo que Montreal es una ciudad con mucho que ofrecer, pero si vas a estar pocos días cómo ha sido nuestro caso, os recomiendo centraros en los imprescindibles que se pueden visitar más que en querer conocer los lugares menos anunciados (esto lo podréis hacer si os quedáis muchos más días en la ciudad).
Lo primero que os quiero recomendar, es la mejor manera de llegar a la ciudad desde el aeropuerto como en nuestro caso. Cómo os decía en mi anterior post, hemos volado desde Barcelona directos a Montreal con AirCanada. Y, al llegar allí, teníamos varias opciones para llegar al dowtown dónde estaba nuestro hotel. Disponéis de una parada de uber en la misma salida si esa es vuestra preferencia; y por lo que revisé, salía a unos 40 CAD el trayecto. La opción que nosotros tomamos fue la del autobús 747 que hace la ruta desde el aeropuerto hasta el centro de la ciudad de Montreal. El precio es de 11 CAD por persona (pero la misma tarjeta te da la opción de viajar en transporte público durante 24 horas desde que la compras) que sale mucho más barato que el trayecto en uber o en taxi.
Aprovecho para hablaros de nuestro hotel. Cómo ya sabéis, cuando preparo un viaje, los hoteles los suelo coger mediante la web de booking. Para visitar Montreal, nos decidimos por un hotel cerca del centro, desde el cuál pudiéramos llegar a casi todos lugares más conocidos andando y sin depender del transporte público. El hotel es el St Denis, y en resumen se trata de un hotel muy sencillo que para los pocos días que hemos estado la ubicación ha sido perfecta para llegar andando a los imprescindibles de la ciudad y la habitación muy limpia, confortable y correcta para el uso que le dábamos, volvería a hospedarme en el sin duda.
Cómo siempre hago en mis viajes, intento empezar los primeros días con un free tour, concretamente hemos utilizado el servicio de Free tour Old Montreal. Considero que el guía que tuvimos, Darren, estaba muy bien informado sobre la historia, economía e información general acerca de la ciudad de Montreal, pero el tour ha sido en inglés y la verdad es que a veces ha sido difícil de seguirle cuando se ponía a hablar tan deprisa. En mi caso, no fui capaz de encontrar un free tour en español para visitar la ciudad de Montreal; de hecho, os adelanto que en el resto de las ciudades que vamos a visitar en estos días tampoco ha sido fácil encontrar tours en español. Aun así, el guía nos dio varias recomendaciones de restaurantes, actividades, lugares para tomar algo, espectáculos, etc. y pudimos visitar todos los lugares imprescindibles que ofrece la ciudad y que os voy a contar a continuación.
Mis imprescindibles de Montreal:
1. Plaza de Armas
Esta es la plaza que alberga algunos de los edificios más importantes y antiguos de la ciudad, cómo, por ejemplo, el banco más antiguo de la ciudad, el primer rascacielos y la propia Basílica de Notre-Dame. En dicha plaza, tuvieron lugar batallas entre colonos religiosos y grupos indígenas por el control de la ciudad. En el centro de la plaza, se levanta el Monumento Maisonneuve homenajeando al fundador de la ciudad, Paul de Chomedey. En mi opinión vale la pena visitar esta plaza para conocer los lugares más emblemáticos de la ciudad y entender el pasado de la misma y de dónde viene la ciudad.
Basílica de Notre-Dame
La respuesta es sí, hay una basílica de Notre-Dame en Montreal, considerada el monumento más importante de la ciudad y que recuerda a la Basílica de Notre-Dame de París, pero siendo más pequeña y sin tanto detalle. Hay la posibilidad de visitar el interior de la basílica por 14 $ por persona adulta, os dejo el enlace para comprar las entradas por adelantado. En nuestro caso, no entramos a visitar el interior pero las otras personas que compartieron con nosotros el free tour comentaron que valía la pena.
Barrio viejo Montreal
Se trata del barrio que inició la ciudad de Montreal y os he de decir que cuando paseas por sus calles, sientes que estás en Europa, y nosotros al venir de Barcelona, nos ha parecido que estábamos paseando por algunas de las principales ciudades del “viejo continente” cómo aquí le llaman por la gran cantidad de terrazas que tenían todos los restaurantes. La verdad es que también puedes notar la decadencia del barrio porque muchos de los edificios se ven antiguos y muchos de ellos no están completamente restaurados; pero la realidad es que se está haciendo un gran trabajo para mejorar este aspecto y que no haya tanto contraste con otras partes de la ciudad más modernas.
Le Grande Rue de Montreal
En el puerto de Montreal, ofrecen muchas actividades para las familias con niños, por ejemplo, unos hinchables para los niños, una tirolina y finalmente la noria más alta de Canadá, conocida cómo Le Grande Rue de Montreal, que permite observar la ciudad desde 60 metros de altura. La entrada tiene un coste de 26$ por adulto y te permite hacer cuatro vueltas en la Noria con una duración total de 20 minutos el trayecto. Podéis comprar las entradas con antelación en el siguiente enlace. En mi opinión es una buena oportunidad de ver la ciudad desde las alturas y con una visión 360º, y muy recomendable si no tenéis miedo a las alturas.
Mercado Jean Talon
Se encuentra en el barrio Little Italy de Montreal y es el mercado más diverso de la ciudad. Se nota la calidad de los productos mientras paseas por sus paradas; de hecho, es un mercado dónde muchos restaurantes compran los productos para abastecerse. También ofrece pequeños restaurantes que ofrecen diferentes tipos de comida; en nuestro caso, fuimos a probar un plato típico de Canadá, la Poutine. Es una visita muy recomendable pero algo alejada del centro, con lo que es recomendable ir hasta allí en metro.
Montréal Subterráneo
Cómo sabéis, Canadá es un país donde en invierno hace mucho frío, y es muy difícil hacer vida en la calle. Es por eso por lo que existe un Montréal subterráneo que es un conglomerado de pasillos bajo tierra que conectan algunos edificios del centro de la ciudad para poder moverse sin tener que salir a la calle. Con el free tour que hicimos, visitamos una parte de estos pasillos y la verdad es que son muy útiles incluso ahora en verano si es un día muy caluroso. Se puede acceder a estos pasillos subterráneos desde varios puntos de la ciudad y algunos conectan con las líneas de metro.
Mont Royal
Esta es una montaña que se encuentra en medio de la ciudad y es un lugar de esparcimiento para la población de Montreal para ir de excursión, a hacer deporte, o, cómo hicimos nosotros, disfrutar de las vistas de toda la ciudad de Montreal. Para llegar hasta los miradores, cogimos el autobús nº 11 desde la parada de metro de Mont Royal de la línea naranja. El mirador que permite ver el skyline de la ciudad es el de Kondiaronk Belvedere; pero después decidimos bajar un trozo del camino andando en lugar de coger de nuevo el autobús y al ser un día soleado fue un paseo muy agradable y recomendable de hacer.
Estos han sido nuestros imprescindibles teniendo dos días en la ciudad, pero si tenéis más días os recomiendo seguir disfrutando otros barrios que hay en la ciudad y que son el reflejo de las comunidades que llegaron a Montreal años atrás. Y, si os gusta el Jazz, Montreal también es vuestra ciudad, ya que alberga muchos clubes con música en directo además de un festival de Jazz a finales del mes de junio.
Espero que este post os haya ayudado a conocer un poco más de Montreal y os ayude en vuestra próxima visita a la ciudad. Y, si no teníais pensado visitarla, que os hayan entrado ganas de hacerlo.
¡Nos vemos por los aeropuertos!
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Viajar con Cristina 