
¡Hola viajer@s!
Esta vez quiero hacer un post un poco diferente. Hoy os vengo a hablar de uno de los objetivos que tengo cómo viajera. Me gustaría llegar a visitar todas las maravillas del mundo moderno (espero que no cambien en los próximos años…). El listado actual de las maravillas del mundo surgió el 7 de julio de 2007 a través de un concurso público e internacional dónde más de 100.000 personas pudieron votar y escoger a estas siete maravillas entre setenta y siete lugares semifinalistas. Si tenéis curiosidad por conocer cuáles eran todos los lugares que entraron en el certamen, podéis consultarlo aquí. ¿habríais escogido otras de entre las opciones?
Durante mis años viajando, he tenido la oportunidad de visitar ya cuatro de las siete maravillas mundo y por diferentes tipos de viajes. Os lo cuento en orden cronológico:
Coliseo, Roma, Italia

Esta maravilla del mundo, he tenido la suerte de poder visitarla en tres ocasiones (en 2008, 2010 y 2020); y cada una de esas veces, ha sido diferente. He podido ir tantas veces por la cercanía que tenemos con Italia desde Barcelona. Aunque quizás parezca la menos glamurosa de las maravillas, por la cercanía que tenemos aquí, la verdad es que, en mi opinión es uno de los monumentos más bellos que tiene Roma (os tengo que hacer un post sobre la ciudad).
Actualmente, es una de las mayores atracciones de la ciudad de Roma. En la antigüedad, fue el lugar dónde los gladiadores luchaban entre ellos y contra distintas bestias ante un gran público enloquecido. Es muy interesante visitar este lugar para llegar a entender cómo era este espectáculo. Mi recomendación para que lo podáis visitar es que compréis las entradas con antelación para evitar las largas colas. Y, si os gusta cómo a mí la historia, os recomiendo hacer la visita con un guía especializado o con la audioguía.
Gran Muralla, Pekín, China

Fue la segunda maravilla que conocí. Además, fue en una época de mi vida en la que todavía no había conocido tantos lugares cómo conozco ahora, y la verdad es que me impactó muchísimo la grandiosidad de ese lugar. Mirabas al horizonte y solo se veían metros y metros de muralla.
Tuve la gran suerte de visitar la muralla a mis veintipocos con una beca por estudiar chino en el 2014 (estudié chino durante unos cuatro años e hice dos exámenes oficiales; y fue al hacer uno de esos exámenes cuando nos dieron esa beca). La experiencia consistía en poder estar 10 días en Pekín, en las instalaciones de una escuela para hacer clases de chino y mejorar el idioma y poder visitar Pekín y sus alrededores. Ese fue el primer viaje de larga distancia que hice en mi vida y no lo olvidaré.
Me gustaría volver a visitar China en mi vida porque en esa ocasión solo pude visitar la ciudad de Pekín y alrededores; así podría visitar muchas más partes del país, que según dicen es espectacular.
Chichén Itzá, Yucatán, México

Tuve la oportunidad de conocer esta maravilla del mundo en 2017 gracias a unos billetes de avión que ganó mi prima en un concurso de fotografía en la red social de Instagram (porque sí, viajer@s, estos concursos son reales y se pueden ganar). Y, aprovechando estos vuelos, hicimos una ruta en coche por la península de Yucatán (os haré un post al respecto). Este lugar arqueológico es, actualmente uno de los yacimientos de la cultura maya mejor conservados del mundo y la verdad es que no deja indiferente.
Mi recomendación es que cuando vayáis contratéis un guía para que os cuente la historia y las curiosidades que esconde este lugar mágico. En nuestro caso, no habíamos contratado ningún guía previamente, y os recomiendo que esperéis a llegar a la puerta del lugar porque siempre hay guías locales allí (pero ojo, porque os deben enseñar la identificación de guía local). Lo que más curiosidad de generó fue el efecto de eco que se consigue en una parte de la pirámide. Además, nos explicó el guía que, en el cambio al solsticio de verano, en la Pirámide de Kukulcán, el monumento más reconocible del lugar, el juego de luces provoca que se vea el descenso de Kukulcán por una de las escaleras de la pirámide. Por la época en la que fuimos, no pudimos disfrutar de ese espectáculo de luces tan especial.
Petra, Jordania

Creo que todos cuando pensamos en Petra, se nos viene a la mente la película de Indiana Jones, pero Petra no es solo el tesoro (el tesoro es la parte más famosa de Petra). Visité mi cuarta maravilla del mundo en el año 2019 en una ruta entre Israel y Jordania (del que haré post en blog). Cómo decía, aunque cuando pensamos en Petra, siempre pensamos en el tesoro, en todo el entorno del lugar, hay muchísimo más que ver. De hecho, mi parte favorita de Petra fue el Monasterio, que está en la parte de arriba; en este punto, si tenéis la oportunidad de ir, os recomendaría que solicitéis que os lleven al monasterio a primera hora del mañana, para poder estar sol@s allí, además de ahorraros de subir 900 escaleras… solo tendréis que bajarlas. Las sensaciones que uno tiene al entrar en un lugar así, no se pueden explicar.
Cómo sabéis, quedan tres maravillas más, que todavía no he visitado: El Cristo Redentor o Cristo de Corcovado en Rio de Janeiro, Brasil; Machu Pichu en Cuzco, Perú y el Taj Majal en Agra, India. Hoy en día, todavía no tengo claro cuando podré visitar las maravillas que me faltan, ni el orden en el que lo haré, pero mi objetivo lo tengo claro… ¡visitarlas todas y contároslo en este blog! 🙂
Y, vosotr@s, ¿habéis visitado alguna de las maravillas del mundo?
Espero que este post os haya gustado.
¡Nos vemos por los aeropuertos!
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